SALAMANCA ES UNA CIUDAD QUE HAY QUE VER
SALAMANCA, EL ENCANTO DE LA LUZ
CIUDADES DE ESPAÑA CON ENCANTO.
Salamanca es sin lugar a dudas una de los lugares más hermosos de Europa y del mundo. La ciudad en si es un verdadero tesoro artístico. Esta urbe del antiguo Reino de León, declarada Patrimonio de la Humanidad en 1988, es un inmenso monumento en todo su conjunto. El arte plasmado en sus monumentos, la cultura que se respira en sus calles y plazas y el magnetismo indescriptible de Salamanca se mezclan con armonía y equilibrio plasmando una belleza diferente y única. No solamente es el impresionante arte plasmado en la arquitectura de los monumentos de Salamanca, sino el encanto y la magia que las calles de Salamanca esconden para quien sea capaz de percibirlo.
http://es.wikipedia.org/wiki/Salamanca#mediaviewer/Archivo:Panor%C3%A1mica_Plaza_Mayor_Noche.jpg Que ver en Salamanca. Plaza Mayor de Salamanca Ciudades de España con encanto |
Un fin de semana, un puente o unas vacaciones en Salamanca
Un fin de semana o un puente en Salamanca se convertirán
sin duda en una elección espléndida e inolvidable. Si el viajero es afortunado y dispone de un
poco más de tiempo, los alrededores de Salamanca constituyen un complemento
ideal a la visita. Acercarse a Guijuelo
y saborear su renombrado jamón. Visitar
villas como Ciudad Rodrigo o Alba de Tormes
y la posibilidad de conocer Sierra de Gata son alguna de las
alternativas
La facilidad con que hoy día se puede visitar Salamanca, una ciudad
tan bella y especial, hace que sea una visita imprescindible para cualquier viajero que busque lugares diferentes, hermosos y con
encanto para hacer turismo.
Algo que hay que ver en Salamanca
Salamanca está construida casi en su totalidad con una
piedra muy especial. Los monumentos de Salamanca y gran parte de casas de la ciudad antigua
emplearon en su construcción la piedra
extraída de las canteras de Villamayor de Aramuña, localidad muy cercana a la
capital. Las características de esta piedra provocan que el reflejo de la luz
en ella adquiera un bellísimo color dorado, que acaba envolviendo toda la
ciudad. Debido a ello, Salamanca es
conocida por muchos como la ciudad dorada.
Ver la imagen de la ciudad desde una cierta distancia al
atardecer o al amanecer en un día soleado, es una experiencia difícil de
olvidar. Incluso hay viajeros, amantes de la fotografía que contratan un
taxi con este sólo objetivo. No
obstante, sólo con cruzar el rio Tormes que acuna Salamanca, a través
del precioso puente romano y buscar una
vista de las catedrales ya es un
espectáculo maravilloso. El brillo dorado de sus piedras y la silueta de los
hermosos edificios dibujan un plano esplendoroso.
Los monumentos de Salamanca
Conocidas como la Catedral Nueva y la Catedral Vieja de Salamanca,
ambos edificios forman un conjunto de una belleza insuperable. Visitar las Catedrales de Salamanca es totalmente imprescindible.
La Catedral Nueva de Salamanca, iniciada en gótico tardío y con reflejos barrocos es contigua
a la Catedral Vieja. Iniciada en estilo
Románico y finalizada en gótico, por una inmensa fortuna para la humanidad no
llegó a ser derruida jamás. Más allá del
incalculable tesoro artístico que este conjunto representa, la posibilidad de subir a las torres de las
catedrales que ofrece Salamanca es una experiencia sobrecogedora y así mismo imprescindible.
La Universidad de Salamanca es una institución que marca
la existencia de la propia ciudad y le imprime gran parte de su magnetismo. El bellísimo edificio donde la Universidad de Salamanca tiene
su sede ha irradiado la cultura y el saber desde el siglo XII hasta nuestros
días. Su presencia se palpa y se siente en toda la ciudad y sus ciudadanos.
Salamanca es arte y cultura, magia y esplendor.
La Plaza Mayor de Salamanca es otra joya que hay que visitar. Acceder a ella por las callejuelas después de
visitar cualquiera de sus espléndidos monumentos es una maravilla. Es necesario
sentarse en alguna de las terrazas de los bares, saborear la excelente gastronomía de
Salamanca o simplemente descansar y dejar que el hechizo de Salamanca te
impregne.
Sentir el magnetismo del Huerto de Calixto y Melibea, el misterio de La Cueva de
Salamanca,
la belleza del Palacio de la Salina y sus leyendas, El
Palacio de Monterrey, La Casa de las Conchas, la Iglesia y convento de San
Esteban o La Casa Lis. Todas estas maravillas de Salamanca forman una
lista de bellezas interminable.
Para acabar de sentir la magia y el magnetismo que
desprende Salamanca, desde el mismo
Ayuntamiento en la Plaza Mayor, se organizan breves visitas nocturnas de la
ciudad. En ellas se narran leyendas y curiosidades al pie de los monumentos y
entre las callejuelas que enamoran a cualquier visitante.
Algo que hay que hacer en Salamanca. La cultura es curiosidad e innovación
En Salamanca es imprescindible detenerse y observar
algunos detalles extraordinarios.
En la preciosa fachada de la Universidad permanece
escondida la escultura de una rana que se supone proporciona suerte a quien la
descubra por sí mismo. Encontrarla es un verdadero reto en esa fachada plagada
de espléndidos detalles. Más sorprendente aún, por su atrevimiento y
originalidad es contemplar detenidamente la Puerta de Ramos, en la fachada de
la Catedral de Salamanca. Con paciencia se pueden observar la presencia de
algunos insólitos detalles. La escultura de un astronauta, un lince, un toro y un dragón o diablillo comiéndose un
helado de tres bolas.
Viajar a Salamanca es una experiencia maravillosa y seductora. Salamanca es una ciudad que con su magia y esplendor cautivará a cualquier persona con inquietudes y sensibilidad.
Un viaje fácil e imprescindible para cualquier turista.